3.
Restricción /Atenuación :
Sin.embargo
A fin
de cuentas
Aun
así
Es verdad
que
A
pesat
de ello
Ahora bien
Al íin
y
al cabo
En
cambÌo
4. Adición:
Además
Asimismo
5. Consecuencia:
Así
pues
De
ahí
que
Por
(lo)
tanto Por ende
Pot
consiguiente
De modo
que
6. Opinión:
En mi opinión En mí criterio
A mi modo
de
ver A
juicio
de
A mi
entender/parecer Según
Cabe aãadir
Algo
parecido/semejante
ocurre con
En resumen
En resumidas cuentas
Total
7. Resumen:
En
suma
En
una
palabra
En íin
EL ALMA DE LOS BRUTOS
Siempre he
pensado
que
el
gran
error de los antitaurinos es
que
acuden al trapo como los
<victorinos>:
con
demasiada nobleza y
un
punto
de entraflable mansedumbre en
la
embestida. En un
país
como éste, en el
que,
desde siempre. se ha tenido
por
costumbre
apedrear a los
gatos
callejeros
(como
antaflo a las adúÌteras)
para
divertimento
de las almas infantiles, inaugurar las fiestas
patronales
de la aldea anojando una cabra al vacío
desde lo alto del
campanario o
pasaportar
a mejor
vida al
propio perro
con
la
azada o colgándole de un árbol,
socavar los cimientos ancestrales de la fiesta exige mucho más
que
una buena dosis
de buena
voluntad
y
de
franciscanismo
ecologista. Los taurinos conocen bien sus armas, disfrutan la ventaja de
jugar
en campo
propio
y, por
si
fuera
poco,
en
los
últimos aflos,
la moda de Espafla ha llenado
las
plazas
de toros de modemos
y
de
intelecutales.
(...)
Pero los modemos
espaõoles no son nada sin
los intelectuales. Los modemos
espafloles,. como los nuevos
ricos,
tienen mala conciencia
y
necesitan, en el fondo,
que
alguien
piense por
ellos
y
salga en su defensa
cuando
algún miserable como
yo
les recuerde,
por
ejemplo, no sólo
que
la fiesta es un ritual sangriento
y
prehistórico (retóricas
al
margen),
sino, también
-y eso es mucho más
grave-! que
la
mayor
parte
de ellos no
había visto
nunca una côrrida hasta hace solamente un
par
de aflos. Para explicar todo eso,
para
justificarlo,
los modemos
espafloles necesitan, aunque
nunca Ìos lean,
a
los intelectuales.
Julio Llamazares, Diano EI Mundo, 1991.
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